La enfermedad conduce a una disminución significativa en la densidad ósea, debilitando los huesos por lo que aumenta el riesgo de fracturas. Cuando el equilibrio entre la construcción y la ruptura se cambia, entonces la densidad ósea disminuye. Con la edad, este problema tiene una tendencia a aumentar.

Actividad física

La actividad física, además de ser lo mejor que puedes hacer por ti mismo, ayuda a que los huesos se vuelvan más densos al presionarlos, lo que puede prevenir la enfermedad. Recomendamos el uso de pesas para fortalecer los músculos esqueléticos.

Aumenta la ingesta de calcio

Fuentes de calcio: Hojas verdes, soja, sardinas, brócoli y nueces. La leche normal de bovino no es tan buena fuente de calcio debido a su baja tasa de absorción.

Aumentar la ingesta de omega-3

Estos ácidos grasos se pueden encontrar en las semillas de lino o el pescado: el salmón, el bacalao y el fletán, y son esenciales para mantener los huesos fuertes.

Reduce el consumo de cafeína y alcohol

Lo siento, pero el café y el alcohol liberan calcio de los huesos y dañan el equilibrio hormonal en el cuerpo, lo cual es importante para mantenerlos fuertes.

Reduce el consumo de carne roja

Parece que estamos eliminando la esencia del almuerzo, pero comer carne roja en realidad reduce la absorción de calcio en el cuerpo.

No fumes

El humo del cigarrillo daña la densidad ósea.

Nueces y almendras

Contienen magnesio que es esencial para el proceso de absorción de calcio.

Al menos 15 minutos de exposición solar al día

Exponer su piel al sol unos minutos al día es la mejor manera de obtener su vitamina D, que funciona como una especie de pegamento y ayuda a mantener la densidad ósea.

Semillas de girasol

Las semillas de girasol contienen cinc, un mineral dominante para mantener los huesos fuertes. Asegúrate de que las pipas no falten en tu dieta.

Asegúrate de que no te faltan estos elementos

Los profesionales creen esenciales: vitamina C, vitamina D, calcio, magnesio, vitamina B12, vitamina B6, ácido fólico, boro, silicio.